Jesús, el Nuevo Pacto, y lo que Significa Para la Humanidad.
José Antonio Espinoza
Director de Goodvivir
Me gusta ponerme en los zapatos de otras personas. Eso me permite ver la vida desde diferentes perspectivas. Un día me pregunté: ¿Por qué Dios en una parte de la biblia se ve tan falto de amor, tan cruel con la humanidad y tan difícil de seguir?
Me refiero a que la ley de Dios, dada a Moisés en el antiguo pacto, era muy fuerte. En la biblia se narran cosas muy fuertes, como por ejemplo: se narra cuando Dios mandó a matar a pueblos enteros que eran idólatras, o cuando los seres humanos insistían en darle la espalda y hacer lo malo ante sus ojos, Dios dejaba de comunicarse con ellos por largo tiempo.
La gente tenía que cumplir con muchas cosas para seguir la ley de Dios. Tenían que sacrificar una ovejita cada vez que querían obtener perdón de Dios por haber violado su ley. Realmente la ley era muy difícil de cumplir. Eso les impedía tener una buena relación con Dios.
Sin embargo, realmente Dios es un Dios de amor. Su plan original siempre fue tener una relación agradable con el hombre, mantener una comunicación constante con nosotros. Tiene planes de bien para todos los seres humanos su creación. El envió a su único hijo para cambiar la historia de la humanidad y establecer un nuevo pacto, que haría más fácil la relación entre el y los seres humanos, su creación.
Cuando Jesús caminó en la tierra, siendo Dios hecho hombre, dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida. Sin mí, nadie puede llegar a Dios el Padre. Juan 14:6 (versión tla)
Jesús vino a la tierra, se hizo humano para a establecer un nuevo pacto de Dios con la humanidad. Lo consumó cuando fue sacrificado, matado, asesinado en la cruz por los errores y transgresiones de todos los humanos. Sin el haber cometido ni un error, ni haber hecho cosa mala, sin haber sido transgresor de la ley de Dios, estuvo dispuesto a morir para mostrar el amor de Dios a la humanidad.
Jesús sanó a enfermos, dió esperanza a los pobres, liberó a los oprimidos espirituales, restauró vidas, hizo muchos milagros que reflejaron no sólo su poder y mostraron que era Dios hecho hombre, sino que vino a establecer el sistema del cielo aquí, en la tierra.
Todos nuestros errores son borrados, y somos salvos por gracia, es decir, es un regalo de parte de Dios, todos calificamos. Nadie puede ser descalificado. Todos podemos entrar en ese nuevo pacto. Lo único que tenemos que hacer es aceptar a Jesús como nuestro salvador personal, como la conexión entre Dios y nosotros. [lee Juan 3:16, 2 Timoteo 1:9, Romanos 5:15, Romanos 6:14, Romanos 11:6, Efesios 2:8, Tito 2:1]
Cuando creemos que Jesús fue y es el hijo de Dios, creemos que es Dios, entonces empezamos a conocer el plan de vida que Dios tiene para nuestras vidas. Cuando vamos conociendo sus atributos y sus promesas para nuestras vidas, entonces comenzamos a cambiar, a mejorar desde ese mismo momento, en el presente, gracias al nuevo pacto por su sangre.
Es como si alguien escribiera en la computadora o en el teléfono con un solo dedo, y de repente otra persona le dice que puede hacerlo con varios dedos. Wow, desde ese momento, aunque te tomará un tiempo y algo de práctica para escribir con varios dedos, poco a poco comenzará a escribir más y más rápido.
Jesús dijo y dice hoy… «Cuando el ladrón llega, se dedica a robar, matar y destruir. Yo he venido para que todos ustedes tengan vida, y para que la vivan plenamente.» Juan 10:10. El no dijo, cuando mueran tendrán vida plena. No, el dijo, «Yo he venido para que todos ustedes tengan vida, y para que la vivan plenamente.»
Amigos, cuando empezamos a estudiar sobre Jesús, vemos que el vino a mejorar la vida de los seres humanos y solucionar los problemas que afectan directamente nuestra manera de vivir en el momento actual, en nuestro presente.
Cuando Jesús caminó en la tierra como humano, hizo muchos milagros, siempre con el propósito de mejorar la vida de los humanos que lo rodeaban.
El nuevo pacto de Dios para la humanidad es una mejoría de nuestra vida presente, desde ahora. Luego, cuando muramos iremos a otra dimensión. Será algo impresionantemente hermoso, vivir en el sistema establecido por Dios. Nunca más sabremos lo que es pobreza, enfermedades, dolor, corrupción y todo lo malo que nos afecta aquí, en la tierra y que nos roba la vida plena que Dios quiere para nosotros. El cielo será algo que, aún cuando tratamos de imaginarlo, nos quedaríamos corto. [lee 1 Pedro 1:4, Juan 14:2, Apocalipsis 5:9-13, Apocalipsis 21:4, Apocalipsis 22:1-5]
No todo está perdido en este momento para la humanidad. Ahora, aquí, en el tiempo que nos ha tocado vivir, Dios quiere y puede ayudarnos a vivir mucho mejor. Quiere que disfrutemos paz, salud, prosperidad, protección, amor, armonia y libertad, siempre y cuando recibamos el regalo de su nuevo pacto. A través de Jesús y por su gracia Dios nos da las herramientas y el medio para que logremos llegar a vivir nuestro máximo potencial.